Pero cuando alguno de estos nutrientes falta en nuestro cuerpo, comienzan a aparecer síntomas o problemas que muestran donde puede encontrarse la falla.
Toda persona puede preguntarse qué es lo que le está sucediendo porque piensa que está comiendo de manera saludable, pero lo que puede pasar es que está cometiendo alguno de los siguientes errores en su alimentación:
- Sus comidas las toma de manera descuidada (comidas rápidas, falta de tiempo, irregularidad en los horarios, etc).
- Practica una dieta desequilibrada en determinado tipo de alimentos.
- Hace una dieta no recomendada para su edad o su fisionomía.
- Realiza el consumo de productos nocivos como tabaco, drogas o alcohol en exceso.
- Realiza una mala cocción o conservación de los alimentos ocasionando que su contenido nutricional se vea reducido o eliminado.
- Consume productos que alteran la absorción de vitaminas o minerales.
- Consume ciertos esteroides o pastillas para el desarrollo muscular.
En todos los casos, se debe tener absoluta conciencia de los efectos y consecuencias que puede implicar un exceso de determinada vitamina o mineral en el organismo ya que puede derivar en situaciones peores que las anteriores.
La siguiente tabla muestra los posibles problemas, causas y fuentes de nutrientes. Las vitaminas corresponden a diferentes tipos de alimentos: Vitamina A- huevo y frutos amarillos, Vitamina B1- cereales y frutos secos, Vitamina B2- leche y carne, Vitamina B3- carnes y leche, Vitamina B12- pollo y pescado, Vitamina C- cítricos, Vitamina D- mantequilla y pescado, Vitamina E- aceites y vegetales verdes, Vitamina K- vegetales verdes y aceites de semillas, Calcio- leche, quesos y huevo, Potasio- plátanos, uvas y almendras, Hierro- carne y cereales, Fósforo- pescado y granos integrales, Ácido fólico- cereales vegetales verdes, y Magnesio- pan y frutos secos.