miércoles, 12 de noviembre de 2014

Fm Gastronomía obtiene 2 distintivos M de la Secretaría de Turismo de Querétaro.

¿Qué es el Sistema de Calidad Moderniza?
Es un Sistema de Gestión para el mejoramiento de la calidad, a través del cual, las empresas turísticas podrán estimular a sus colaboradores e incrementar sus índices de rentabilidad y competitividad, con base en una forma moderna de dirigir y administrar una empresa turística, condiciones que le permitirán satisfacer las expectativas de sus clientes.


Con el Sistema de Calidad Moderniza las empresas alcanzan beneficios cuantificables en tres líneas fundamentales:

  1. Elevar la calidad de los servicios y mejorar la atención, para la satisfacción de los clientes. 
  2. Elevar las ventas y reducir los costos, para la satisfacción de los propietarios. 
  3. Humanizar el trabajo, incrementando la participación y elevar la satisfacción de los colaboradores. 
El Sistema Moderniza se conforma por una estructura de 4 elementos y 12 técnicas:

Elementos
Técnicas
Elemento 1. 
Calidad Humana
T1. Lenguaje Básico y Estructuras Organizacionales
T2. Las 5´S
T3. Liderazgo y Desarrollo Humano
Elemento 2.
Satisfacción del cliente
T4. Conocimiento del Mercado
T5. Desarrollo de Personal de Contacto
T6. Marketing
Elemento 3.
Gerenciamiento de Rutina
T7. Procesos y Eliminación de Desperdicios
T8. Estandarización de Procesos
T9. Administración Visual
Elemento 4.
Gerenciamiento de Mejora
T10. Sistema de Información y Análisis Financiero
T11. Política Básica y Directrices
T12. PDCA y Rendición de Cuentas

¿Qué es el Programa Moderniza?

El Programa Moderniza son las actividades de consultoria y capacitación necesarias para que las empresas logren implementar el Sistema de Calidad Moderniza,  tiene una duración mínima de tres y máxima de 4 meses, periodo en el cual las empresas resuelven  gran parte de la problemática que enfrentan.

El Programa Moderniza considera las siguientes actividades:
  • 6 sesiones plenarias de 8 horas en las que participan el director/dueño y el responsable de calidad en un grupo que reúne a todas las empresas del destino.
Cada empresa participante recibe 4 visitas de un consultor M:
  • 1 Visita de Diagnóstico.
  • 2 visitas de asesoría o seguimiento.
  • 1 Visita de evaluación para determinar si la empresa obtiene el Distintivo M.
  • Entrega de Distintivos a las empresas que acrediten el programa.
Actividades Post implementación:
  • Visita de Diagnóstico Situacional.
  • Visita de Renovación.

Resultados del Programa Moderniza 2002-2010

Durante el periodo 2002-2010, la Secretaría de Turismo en coordinación con la Secretaría de Economía-Fondo PYME, las Secretarías Estatales de Turismo y organismos empresariales han llevado acciones encaminadas a implementar el Programa de Calidad Moderniza en más de 7,500 micro, pequeñas y medianas empresas turísticas a nivel nacional.

Los resultados globales del programa señalan que de las 7,923 empresas participantes a nivel nacional, 6,385 calificaron para obtener el Distintivo M que las acredita como empresas turísticas modernas. Es decir, más del 80% alcanzó una calificación de excelencia.


Artículo por: Fm Gastronomía

10 consejos para alimentarnos sanamente en invierno.

Llega diciembre y llegan los antojos, y cuando menos lo esperamos los números de la báscula empiezan a subir.



Las ensaladas no resultan nada tentadoras para la época de frío, y como el cuerpo nos pide comida para calentarnos, buscamos alimentos que suelen engordar debido a su alto índice de calorías.

La clave se encuentra en la ingesta de alimentos que nos ayuden a mantener nuestra temperatura corporal y faciliten la generación de energía, pero sin sobrepasar los límites de calorías necesarias para no engordar.

Lo primero que se debe tener en cuenta es lograr un equilibrio consumiento preparaciones ligeras para ingerir lo justo, y que sean fácilmente digeribles por el organismo para cuidar la línea.

  1. Come verduras. Para evitar la típica ensalada de todos los días, puedes transformar los vegetales en crema, sopa, salsa, tortilla, hacerlos rellenos o al vapor, los cuales son platos calientes que puedes ingerir para la cena debido a que las noches son más frías.
  2. Limita los lácteos. Evita el uso de mantequilla, mantecas, leche y aceites para cocinar. Es mejor saltear los vegetales con caldo y agregar el aceite crudo al final de la cocción, de esta manera tu cuerpo no consumirá las peligrosas grasas saturadas.
  3. Elije las frutas. Es importante ingerir tres frutas al día y que al menos una de ellas sea cítrica, pues debido a que contiene Vitamina C fortalecerá la función inmunitaria. Una opción es preparar los postres a base de frutas asadas y acompañarlas con condimentos que no tienen calorías como el anís o la canela.
  4. Los cereales. Las frutas deshidratadas, las semillas y los cereales integrales pueden acompañar de manera saludable un postre de invierno. Además aportan una mezcla muy rica de fitonutrientes, antioxidantes, fibra y minerales.
  5. Las legumbres. Las lentejas, el frijol, los garbanzos, el arroz y las habas son fuente de fibra y energía sin contenido graso y con buen poder de saciedad. El invierno es el momento ideal para consumirlas.
  6. Las proteínas. El pescado, las carnes magras, el pollo, el huevo y los lácteos descremados son alimentos que puedes consumir sin el problema de subir de peso. Elige cocinarlos a la plancha, al vapor o al horno y olvídate de los empanizados.
  7. Cuidado con el pan. El pan, los pasteles, las galletas, la pasta, el chocolate y el azúcar en general pueden ser muy peligrosos si se abusa de ellos durante los meses de frío, ya que provocan la acumulación de grasas que se adhieren al cuerpo y son más difíciles de remover.
  8. Come más. Recuerda que debes consumir de 4 a 5 comidas al día, de esta manera evitarás los excesos que provoca tener hambre y la acumulación innecesaria de grasa en los tejidos. Toma mucha agua, té, poco café y olvídate de los refrescos y el exceso del alcohol.
  9. Haz ejercicio. Para que no tengas frío, salte a caminar, correr o andar en bicicleta. Recuerda que la inactividad trae malos hábitos y exceso de comida hipercalórica.
  10. Cuida tus hábitos. Si mantienes tus hábitos de comidas, tiempos, horarios y cantidades podrás llegar al verano sin esos odiados kilos de más.

¿Cómo mantener nuestro rendimiento en épocas de frío?


Es normal que durante el invierno nuestra actividad física se vea afectada y que nos sentimos entumecidos deseando estar todo el día en cama con muchos cobertores. Todo esto lo único que ocasiona estar pensando continuamente en estar comiendo, ya que nuestro cuerpo nos pide constantemente comida para mitigar el frío.




Pero para no subir de peso en el invierno y no bajar nuestro rendimiento físico diario debemos tomar en cuenta algunas consideraciones:

  • DESAYUNA. Un desayuno que incluya carbohidratos y proteínas te ayudará a mantenerte con energía suficiente durante el día. Recuerda que el desayuno es la comida más importante, por lo que debes nutrir tu cuerpo para que empiece a funcionar desde temprano.
  • TOMA AGUA. Es normal que en tiempo de frío lo último que pensemos es en tomar agua pues como no sudamos, no nos da sed. Estar hidratados es un factor importante en nuestro rendimiento físico para que nuestro cuerpo realice sus funciones diarias. Y si no quieres tomar agua, otra buena opción son los jugos de frutas o también los tés, los cuales además de calentarte tienen propiedades benéficas para el organismo.
  • REALIZA TUS COLACIONES. Recuerda que en el invierno nuestro organismo necesita un aporte de energía constante. Por lo que además de realizar tus tres comidas principales del día, debes hacer dos pequeñas colaciones: una a mitad de mañana y otra a media tarde donde incluyas frutas, verduras, cereales o frutos secos. De esta manera, además de darte energía provocarán que tengas un metabolismo acelerado.
  • EVITA EL CONSUMO DE AZÚCARES. En épocas decembrinas los antojos están al por mayor sobre todo por la gran variedad de pasteles, dulces, galletas y chocolates en tantas cenas y reuniones navideñas. Estos productos están procesados con azúcares adicionadas, los cuales aportan un bajo valor nutricional y un alto contenido de calorías. El consumo excesivo de estos productos puede ocasionar un aumento de peso y al mismo tiempo un menor rendimiento físico. Trata de comerlos en una mínima cantidad y no diariamente.

¿Cómo decirle NO al sedentarismo en invierno?

Para muchas personas la temporada de frío se convierte en un periodo de hibernación pues casi siempre están entumecidas y lo único que piensan es en meterse bajo las cobijas y comer todo el día.



De igual manera, es posible que no queramos salir de nuestra zona caliente de confort y que nos dé flojera o miedo movernos porque pensamos que no aguantaremos y comenzaremos a temblar.

Por eso es importante saber que el frío sólo se combate entrando en calor y si eres de los que no practican un deporte con regularidad, te damos algunas opciones para que el frío se vaya más rápido de tu cuerpo y también logres mantener tu peso en el invierno.

  • CAMINAR. Caminar es un excelente ejercicio para mantenernos sanos. Si el clima no es el mejor para poder salir, también lo puedes hacer dentro de tu casa, seguro hay alguna área con el suficiente espacio para que puedas dar un “paseo”.
  • SUBIR POR LAS ESCALERAS. Trata de evitar el uso de elevadores y sube varias veces las escaleras ya sea en nuestro hogar o en el trabajo. Esto nos ayudará a calentarnos y perder algunas calorías. 
  • BAILAR. Bailar es una divertida forma de movernos y deshacernos del frío, y sin darnos cuenta estamos haciendo ejercicio pero con ritmo y buen ambiente. Puedes practicar el baile en tu hogar, con tu familia o algún grupo de amigos, lo único que necesitan es un espacio y una buena playlist para comenzar con tus mejores pasos.
  • LA LIMPIEZA. Hacer los quehaceres del hogar también nos puede ayudar a quemar unas cuantas calorías. Pon manos a la obra y acomoda algún espacio que esté desarreglado, usa la escoba o el plumero, ¡y a moverse por la casa!
  • RUTINAS. Puedes practicar algunas rutinas en la comodidad de tu hogar o en un gimnasio, si es que tienes alguna membresía. Incluir algunos desplazamientos, abdominales y levantamientos de mancuerna. Estos te ayudarán a calentarte y también a tonificar tus músculos.
  • YOGA. La práctica del yoga es una muy buena opción para mantener tu cuerpo y mente en equilibrio. Es un ejercicio sencillo en el que cada postura te ayudará a fortalecer tus músculos y tus huesos.
  • BICICLETA. Que no te dé miedo salir a dar una vuelta en tiempo de frío. Solamente cúbrete bien cuando salgas pero no uses demasiadas prendas porque te dará calor de inmediato.
Artículo por: Fm Gastronomía

lunes, 15 de septiembre de 2014

Los 7 pecados de la alimentación.

Normalmente el cuerpo humano trata de mantenerse en perfecto equilibrio y para ello es que procesa vitaminas, minerales, energía y demás nutrientes que a diario ingerimos en nuestras comidas. Este equilibrio es el que conserva todos nuestros órganos y sistema funcionando correctamente. 















Pero cuando alguno de estos nutrientes falta en nuestro cuerpo, comienzan a aparecer síntomas o problemas que muestran donde puede encontrarse la falla.

Toda persona puede preguntarse qué es lo que le está sucediendo porque piensa que está comiendo de manera saludable, pero lo que puede pasar es que está cometiendo alguno de los siguientes errores en su alimentación:

  1. Sus comidas las toma de manera descuidada (comidas rápidas, falta de tiempo, irregularidad en los horarios, etc). 
  2. Practica una dieta desequilibrada en determinado tipo de alimentos. 
  3. Hace una dieta no recomendada para su edad o su fisionomía. 
  4. Realiza el consumo de productos nocivos como tabaco, drogas o alcohol en exceso. 
  5. Realiza una mala cocción o conservación de los alimentos ocasionando que su contenido nutricional se vea reducido o eliminado. 
  6. Consume productos que alteran la absorción de vitaminas o minerales. 
  7. Consume ciertos esteroides o pastillas para el desarrollo muscular. 
De igual manera es muy común encontrar personas sin problemas de salud que consumen suplementos para cubrir diferencias nutricionales. Esto se justifica para quienes padecen alguna enfermedad, problema o que por alguna razón verdaderamente justificada deben suprimir cierto tipo de alimento o variedad de ellos. Pero para personas que no sufren de ningún problema específico, lo más conveniente es incluir aquellos alimentos que permitan mantener el equilibrio en forma natural.

En todos los casos, se debe tener absoluta conciencia de los efectos y consecuencias que puede implicar un exceso de determinada vitamina o mineral en el organismo ya que puede derivar en situaciones peores que las anteriores.

La siguiente tabla muestra los posibles problemas, causas y fuentes de nutrientes. Las vitaminas corresponden a diferentes tipos de alimentos: Vitamina A- huevo y frutos amarillos, Vitamina B1- cereales y frutos secos, Vitamina B2- leche y carne, Vitamina B3- carnes y leche, Vitamina B12- pollo y pescado, Vitamina C- cítricos, Vitamina D- mantequilla y pescado, Vitamina E- aceites y vegetales verdes, Vitamina K- vegetales verdes y aceites de semillas, Calcio- leche, quesos y huevo, Potasio- plátanos, uvas y almendras, Hierro- carne y cereales, Fósforo- pescado y granos integrales, Ácido fólico- cereales vegetales verdes, y Magnesio- pan y frutos secos.







































Artículo por: FM Gastronomía
www.fmgastronomia.com.mx

Razones por las que nos excedemos de peso.

¿Por qué engordamos? ¿Qué provoca el sobrepeso? ¿La genética, las grasas, el estrés, el sedentarismo?


El sobrepeso no es un problema que aparezca por arte de magia, sino más bien es un proceso lento y gradual que puede viene marcado por diferentes factores (alimentación, sedentarismo, cambios hormonales, genética, etc.) y que sin un control dietético profesional puede llevar a la obesidad.

Engordamos porque el consumo excesivo de calorías y la inactividad física hacen que nuestro cuerpo acumule aquello que no le hace falta, así que cuanto más comemos y menos quemamos, ¡más engordamos!

Hay personas que le echan la culpa a la genética y la convierten en la primera excusa con diferentes afirmaciones: “Tengo predisposición a engordar”, “Mi abuelo y mi padre son obesos, así que yo también” o “Coma lo que coma, engordo”.
Diversos estudios demuestran cómo las costumbres dentro de una misma familia y la influencia externa tienen más fuerza que la genética en nuestro comportamiento alimentario y reaccionamos a distintos estímulos que nos hacen engordar.
Pero, ¿cuáles son estos estímulos que nos llevan a subir de peso?:

Fármacos: Algunos medicamentos como los antidepresivos y las hormonas femeninas hacen ganar peso.
Dejar el tabaco: Si se dejó de fumar hace poco, es posible que se haya subido algunos kilos, ya que la nicotina interviene en el control del apetito a nivel del cerebro, estimula la saciedad y disminuye el hambre, esto genera un incremento de aproximadamente 2 Kg en los primeros seis meses, y después tiende a estabilizarse.
Algunas fases de la vida: Los cambios hormonales de la pubertad, los embarazos y la menopausia favorecen el aumento de peso en las mujeres.
Los cambios del modo de vida: Cambio de trabajo, jubilación, mudanza, defunción de una persona cercana, rupturas sentimentales. Acontecimientos que al influir sobre el ánimo y las costumbres pueden provocar perturbaciones en el peso.
Comer mecánicamente: Uno de los responsables de la ingesta excesiva es el no poner atención a lo que se está comiendo, ni distinguir la sensación de hambre real de las ganas de comer. Además, el hecho de “estar picando” lo que uno encuentra conduce a comer más de la cuenta para las necesidades que tiene el organismo. Comemos aunque no tengamos hambre y esto sucede cuando se deja la comida a la vista, cuando se huele, se cocina o si se va a comprar hambriento.
Servirse raciones abundantes de comida: La ingestión abundante de comida ayuda a disminuir la ansiedad y nos proporciona confort emocional.
No tener un orden en los horarios de las comidas.
Llevar una dieta rica en hidratos de carbono.
No hacer ejercicio: Es muy importante determinar la relación alimentación-ejercicio. El hecho de bajar el ritmo e intensidad de la actividad física, sin reducir la cantidad de comida ingerida, puede llevar a la obesidad por un exceso de energía.
Estrés: Factores estresantes prolongados resultan en una alteración hormonal que produce obesidad de tipo abdominal.
Déficit de sueño: La falta de sueño produce modificaciones endocrinas que favorecen el hambre y la ganancia de peso corporal.

Por eso para que el sobrepeso no se convierta en un problema mayor es importante aprender a controlarlo llevando un diario dietético. En este diario se debe anotar todo lo que se consume a lo largo del día, a qué hora, el lugar, la cantidad, el lugar donde se ingirió y los sentimientos asociados al momento de comer como el estrés, la ansiedad, el aburrimiento, la depresión, etc. Si se lleva diariamente este control será muy fácil decirle adiós a la obesidad.


Artículo por: FM Gastronomía
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¿Cómo controlar el ansia de comer?

Uno de los más grandes placeres en la vida es definitivamente el comer, pero claro, sin el remordimiento de ver cuánto gastamos o del temor a subir de peso al ingerir todo lo que encontremos a nuestro paso.


Posiblemente has escuchado de personas que viven para comer y no comen para vivir, y cuando se tiene este tipo de actitud ante la comida (o desorden alimenticio), casi siempre se relaciona con problemas emocionales.

El estrecho vínculo entre la comida y las emociones es evidente. La ansiedad que nos genera el estrés, la monotonía de una vida cotidiana, las frustraciones o hasta la propia gratificación de los logros alcanzados, nos lleva a comer para calmar dicha sensación.

El principal causante de la ansiedad es la sensación de hambre producida por llevar muchas horas sin probar bocado. Desayuno escaso, nada de almuerzo, comida justa y merienda escasa, lo que supone llegar a la cena con un hambre voraz y comer impulsivamente.

La ansiedad es un estado de hiperexcitación nerviosa que todos podemos padecer, el cual se puede convertir en un problema serio que puede generar adicción. Y esas ganas irresistibles de comer lo que no se debe en horarios donde no se puede, es una ansiedad, la cual se considera una de las adicciones más frecuentes relacionadas con los alimentos. 

Aunque no existen fórmulas mágicas para que la ansiedad desaparezca, sí existen algunos consejos que pueden ayudar a tener un estilo de vida más saludable, lo único que hay que hacer es tener fuerza de voluntad para llevarlos a cabo.

1.- Reducir el azúcar. Entre más alimentos dulces consumas, más tendrás la necesidad de retener ese sabor. Trata de eliminar gradualmente el azúcar de tu dieta, o elige productos que sean light para no acumular calorías. Cuando vayas al supermercado, no compres antojos y mejor elije frutas y verduras.

2.- Tomar mucha agua. Dicen los especialistas que es buena costumbre tomar agua antes de cada comida para sentir menos hambre. De igual manera, no olvides tomar de 6 a 8 vasos de agua al día.

3.- Comer varias veces. Los nutriólogos recomiendan hacer 6 comidas al día: 3 principales y 3 meriendas, ya que si saltas alguna comida en la siguiente desearás comer el doble y engordarás más. 

4.- Haz ejercicio. Para controlar la ansiedad no existe nada mejor que la actividad física por lo menos 30 minutos y de 3 a 5 veces por semana.

5.- Distrae la mente. Cuando sientas deseos de comer lo prohibido, trata de desviar la atención y realiza alguna actividad que aleje los deseos de buscar comida.

6.- Prepara un buen desayuno. Cuando te levantas, tu cuerpo viene de un largo ayuno. Si omites el desayuno tu metabolismo será lento y sentirás ganas de comer el doble al final del día.

7.- Relájate. Infusiones como la manzanilla, el té verde, la valeriana y la Jamaica, pueden ayudar a reducir la tensión y calmar la ansiedad por comer lo que no debes.

8.- Duerme bien. No hay nada mejor para combatir la ansiedad que el dormir. Cuando descansas aumenta la producción de leptina, una hormona que le indica al cerebro que tu cuerpo está satisfecho.

9.- Más proteínas. Si aumentas la ingesta de proteínas en el desayuno, tendrás mayor sensación de saciedad durante el día. El cuerpo quema más calorías tratando de digerir las proteínas y éstas se absorben más lentamente, por lo que te sentirás lleno por más tiempo. 

10.- Analiza tu rutina. Determina qué es lo que te provoca esas ganas de comer en exceso; si descubres el problema, la solución será más sencilla.

Artículo por: FM Gastronomía

domingo, 17 de agosto de 2014

La comida y el estado de ánimo.

Consumir alimentos que nos gustan puede animarnos y hacernos sentir satisfechos y relajados. Y por el contrario, en ocasiones, comer nuestros alimentos favoritos puede provocarnos sentimientos negativos de culpa y remordimiento. ¿Cómo podemos reducir los efectos negativos y aumentar el impacto positivo de la comida en nuestro estado de ánimo?



El principio del placer.
Comer es uno de los placeres de la vida, y siempre que es posible comemos alimentos que nos gustan y evitamos aquellos que no nos gustan. Los estudios muestran que el hecho de comer los alimentos que uno prefiere puede estimular la liberación de ß-endorfinas, que son las que mejoran nuestro humor. Sin embargo, el hecho de que una comida nos resulte atractiva no sólo está relacionado con sus propiedades organolépticas, también depende de cuánta hambre tengamos, de las experiencias previas con ese alimento y las circunstancias sociales en las que se consume. En otras palabras, lo que nos hace sentir bien es consumir el tipo de alimento apropiado, en el momento apropiado y en la compañía apropiada.

Los antojos
o los impulsos por comer alimentos concretos, son bastante comunes. Entre el 60% y el 90% de las personas reconocen haber tenido antojos, dependiendo de la población estudiada. Es curioso comprobar que los hombres y las mujeres relacionan los antojos con actitudes y emociones diferentes. Los hombres suelen pensar que los antojos surgen cuando tienen hambre, mientras que las mujeres tienden a relacionarlos con estados de ánimo negativos como el aburrimiento o el estrés. Además, las mujeres tienden a experimentar más sentimientos negativos como culpa y remordimiento tras haber ingerido la comida deseada.Generalmente, el alimento objeto del antojo es una 'comida prohibida', como el chocolate. Si se evita conscientemente este alimento, el deseo de consumirlo aumenta hasta que la persona al final no puede resistir a la tentación. Después de consumir ese alimento, aparecen los sentimientos de culpa y remordimiento y la persona decide no volver a comerlo.

¿Tiene sueño?
Los efectos de los diferentes nutrientes se han estudiado en profundidad, pero, hasta el momento, no está claro cuál es su impacto en los estados de ánimo. Por ejemplo, algunos estudios muestran que los hidratos de carbono nos hacen sentirnos relajados y somnolientos, mientras que otras investigaciones no encuentran evidencia alguna de que los hidratos de carbono afecten al estado de ánimo. Puede que cada persona reaccione de manera diferente ante estos nutrientes, como ocurre en el caso de la cafeína. La sensibilidad a la cafeína varía según los individuos. Hay personas que pueden tomar varias tazas de bebidas con cafeína en unas pocas horas sin sentir ningún efecto, mientras que otras experimentan los efectos estimulantes de esta sustancia tras tomar sólo una taza.

Efectos psicológicos.
Es cierto que existe una interacción entre los alimentos y los procesos químicos de nuestro organismo. Sin embargo, no hay que subestimar el impacto de nuestras expectativas en relación con la alimentación. Por ejemplo, si consumir una comida o bebida determinada normalmente mejora nuestro humor o nos despierta, aunque el ingrediente activo esté ausente del alimento o bebida, seguirá produciendo ese efecto, porque es lo que esperamos.

No hay duda de que el sabor de un alimento y el placer de comer pueden mejorar nuestro estado anímico y nuestro bienestar. Sin embargo, el potente efecto positivo derivado de comer alimentos que nos gustan pero que no deberíamos comer puede verse disminuido por los sentimientos de culpa.

Lo más importante es que nos olvidemos de los sentimientos de culpa relacionados con la alimentación. Para esto, debemos desarrollar una relación sana con la comida y unos hábitos alimentarios realistas y saludables. Esto puede incluir formas de administrar el consumo de nuestras comidas favoritas para aumentar el placer sin incurrir en excesos.


FM GASTRONOMÍA
Comedores Industriales